A propósito de nuestro modelo judicial

Resumen

Me pidió el Presidente de ANFE, que dijera unas palabras de bienvenida y de introducción al Seminario. Lo hago con mucho gusto, pero advierto que las insensateces que pueda expresar no le son imputables a él, ni a esta Asociación, ni al Seminario de Derecho Público de la Universidad Autónoma de Centro América, que patrocina el evento.

¿Por qué un seminario sobre el Modelo Judicial costarricense?, y ¿por qué en ANFE?, se preguntarán los asistentes. Por tres motivos contestamos.

1) Porque, como explicó nuestro Vicepresidente, después de haber analizado el modelo político, el económico, el social, el educativo, el tributario y el agrario (análisis que se convirtió en cuatro libros y dos amplios folletos), siempre nos quedó la sensación de que faltaba uno dedicado al “modelo jurídico” o, más restringidamente, a nuestro “modelo judicial”.

2) Porque estamos persuadidos de que el problema jurídico y más específicamente el problema jurídico y más específicamente el problema judicial, no afecta tan sólo a los abogados y tinterillos, sino también y principalmente a los justiciables y, por ello, al desarrollo de nuestra nación. Tendemos a pensar que el desarrollo económico, preocupación que tiene un peso muy importante en esta Asociación, depende casi exclusivamente de las condiciones sociales, políticas y económicas del país y, por lo tanto, del contenido sustantivo de las normas sociales, políticas y económicas, dejando por fuera el sistema judicial y el proceso en general. Nada más equivocado.